Reforma y Estrena
VIVIENDA 120 M2 . URBANIZACIÓN VIRGEN DE ITZIAR, MAJADAHONDA. Presupuesto 22.000 euros.
En la primera visita a la vivienda, nos encontramos una casa amplia y luminosa, pero que acusaba problemas propios del paso del tiempo y desaprovechaba algunos espacios.
Los clientes querían dar a su nuevo hogar un aspecto renovado y moderno.
Para ello se debieron solucionar previamente algunos problemas de habitabilidad; fue necesario el cambio de todos los radiadores y ventanas y la modificación de las instalaciónes eléctricas y fontanería en algunos puntos de la vivienda.
La reforma se centró en tres zonas, que se identificaron como claves para conseguir el fin propuesto.
SALÓN COMEDOR
Planta antes y después de la reforma
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La gran reforma de este espacio consistió en incorporar al salón una parte de la terraza para ampliar así el espacio interior.
Al igual que en el resto de la casa, se lijaron y barnizaron los suelos y se pintó la pared de un color neutro y claro para potenciar la luz en la sala.
La estancia quedó dividida en dos espacios: uno de descanso y reunión y otro destinado a un comedor para recibir invitados con salida a la terraza que, a pesar de haber reducido su tamaño, sigue siendo un espacio amplio, ideal para disfrutar del aire libre.
COCINA
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La reforma de la cocina fue integral. Se retiró el arco que había en el acceso, despejando de esta manera la entrada a la cocina y dando mayor sensación de amplitud.
Se integró la terraza-tendedero en la propia cocina, creando así un pequeño y luminoso office con vistas a la sierra de Madrid.
Se renovaron todos los muebles y electrodomésticos, que habían quedado desfasados.
Por último, se modificó el suelo y el revestimiento de las paredes y se alternó este con pintura de color vivo y papel pintado, consiguiéndose un espacio alegre y luminoso.
BAÑO
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Aunque se reformaron los dos baños de la vivienda, el de la habitación principal fue un punto clave del diseño.
El reto consistía en hacer un baño más espacioso, práctico y moderno.
Se cambiaron todos los sanitarios buscando una línea más acorde al espacio que se pretendía conseguir y se modificó su distribución.
La bañera se retiró y fué sustituida por una ducha más amplia y funcional.
Del mismo modo se sustituyeron los acabados de paredes y suelos, este último prolongándose incluso en la ducha, dando continuidad al espacio.
Se eliminó la celosía que cubría la ventana consiguiendo, así, un ambiente agradable donde de nuevo la luz vuelve a ser, como en la mayoria de la vivienda, protagonista.